Una nueva variable

7 de Julio 2021

El proceso de urbanización en nuestro país ha sido rápido. Solo en la Región Metropolitana, un estudio de CIREN-CORFO reveló que el área urbana de Santiago ha aumentado cuatro veces su volumen en los últimos 50 años, en el que más del 90% correspondía a suelos de buena calidad. La ciudad se ha expandido a […]

El proceso de urbanización en nuestro país ha sido rápido. Solo en la Región Metropolitana, un estudio de CIREN-CORFO reveló que el área urbana de Santiago ha aumentado cuatro veces su volumen en los últimos 50 años, en el que más del 90% correspondía a suelos de buena calidad.

La ciudad se ha expandido a un ritmo acelerado, eliminando la biodiversidad de los suelos en los que se escoge construir.

Carlos Bonilla, académico de la Facultad de Ingeniería e Investigador Asociado del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (CEDEUS), menciona que uno de los aspectos importantes a considerar en un suelo urbanizado es el largo tiempo de reversión. “La urbanización cambia algunas propiedades relevantes en el suelo, que pueden tomar décadas en recuperar su estado original. El suelo es un importante agente regulador del ecosistema y cada vez que se urbaniza, se pierden propiedades físicas, de estructura y de infiltración que tardan mucho tiempo en recuperarse, aún cuando se haga artificialmente”.

Hoy, en el Día de la Conservación de Suelos, es importante considerar un cambio de paradigma la toma de decisiones sobre el suelo en Chile, en la que las variables a considerar a la hora de construir no sean solo el costo, cercanía a servicios u otros, sino que considere la biodiversidad y calidad del suelo en el que se urbanizará.

“Chile tiene suelos de extremadamente buena calidad y algunos tienen un enorme potencial de secuestrar carbono. Si los degradas, ese carbono vuelve como CO2 a la atmósfera. En cambio, si se aplican técnicas para potenciar su capacidad de secuestro de carbono, se realiza un aporte global del control de la temperatura del planeta. En el planeta no hay un elemento que por unidad de volumen albergue más biodiversidad que el suelo. Quizás incluso hay organismos ahí presentes, que pueden llevar a encontrar curas a distintas enfermedades o desafíos del mundo actual”, menciona el docente.

¿Cómo equilibrar la necesidad de urbanización con la mantención de la calidad del suelo? Con un balance. Carlos Bonilla afirma que no se trata de poner un cerco que impida el acceso al suelo si este es de buena calidad, sino que se debe promover la inclusión de la variable “calidad del suelo” en el proceso de toma de decisión. “La pregunta que nos debemos hacer es si es este el  mejor lugar para urbanizar”, señaló.                         

Las reglamentaciones en Chile actualmente no consideran esta variable, pero nuestra Universidad cuenta con un grupo de investigadores que participan en la preparación del anteproyecto de la nueva ley de suelos. En ella, se planea incluir expresamente la degradación del suelo, erosión hídrica y la conservación de propiedades físicas, entre otras.

En este Día de la Conservación de Suelos, la invitación es a no olvidar la importancia de las características del suelo: su biodiversidad, su enorme ecosistema y potencial de secuestro de CO2. La invitación es a cuidar su calidad y no olvidar esta nueva variable en la toma de decisiones.