Vehículos eléctricos: Santiago se mueve con energía verde

30 de Mayo 2022

El objetivo es ambicioso. Se proyecta que a 2050 Chile logre la carbono neutralidad, es decir, que las emisiones de carbones de los distintos sectores productivos lleguen a nivel cero. Se han propuesto muchas soluciones y una de ellas es la modernización del transporte público y particular a través de la electromovilidad. Se espera que […]

El objetivo es ambicioso. Se proyecta que a 2050 Chile logre la carbono neutralidad, es decir, que las emisiones de carbones de los distintos sectores productivos lleguen a nivel cero. Se han propuesto muchas soluciones y una de ellas es la modernización del transporte público y particular a través de la electromovilidad.

Se espera que para ese año, la totalidad las líneas de buses funcionen en base a electricidad y que el parque automotriz de particulares llegue al 40%.

En octubre de 2018, la Ministra de Transportes, Gloria Hutt, presentó la primera flota de taxis eléctricos, 60 vehículos que tienen una autonomía entre 200 y 220 kilómetros y que circularán principalmente desde y hacia el aeropuerto. El funcionamiento de cada taxi evitará la combustión de 1.300 litros de gasolina al año, con la consiguiente nula emisión de tres toneladas de CO2. Según el anuncio de la Ministra, habrán otras flotas en Valparaíso, Viña del Mar y San Antonio.

También el año pasado, se inició el reemplazo del Transantiago por Red, sistema que hasta la fecha cuenta con 400 buses eléctricos, que prestan servicio en distintos recorridos y que logran un desplazamiento aproximado de 250 km. y cuyas baterías tienen una vida útil de 11 años.

Además de los beneficios al medio ambiente se suman las ventajas económicas. Un bus eléctrico consume energía equivalente a $72 por kilómetro recorrido, en comparación a los $370 derivados de la combustión de diesel. 

Todas estas ventajas son gravitantes al momento de aplicar políticas públicas, considerando que nueve de las diez ciudades más contaminadas de Sudamérica se encuentran en Chile, según un informe publicado por Greenpeace y la empresa social Air Visual a principios de año.

Por otra parte, las medidas adoptadas van en línea con lo que el gobierno del Presidente Sebastián Piñera desea presentar con miras a la reunión COP25 que se celebrará a fines de año en nuestro país y que busca la reducción en la emisión de gases. La evidencia científica, como la entregada por el Panel Intergubernmental Contra el Cambio Climático, indica que los países deben limitar sus niveles de contaminación, con el fin de no superar los 1,5°C, lo cual podría evitar el derretimiento de hielo en amplias zonas de la Antártica, el Ártico y la desaparición de glaciares alrededor del mundo.

Sin embargo, se han elevado críticas al proceso, pues la mayor parte de la generación de energía en Chile deriva del uso de carbón, combustible fósil altamente contaminante. Un informe de Chile Sustentable indica que las 28 plantas carboneras actualmente operando en nuestro país son responsables del 91% de las emisiones totales de dióxido de carbono, el 97% de las emisiones totales de dióxido de azufre y el 91% de la emisión de óxidos de nitrógeno

Es por lo anterior que la declaración de carbononeutralidad a 2050 muestra la intención de cumplir con los objetivos nacionales e internacionales de lucha contra el cambio climático, pero es necesaria una mayor voluntad y compromiso para cumplir con los compromisos adquiridos. Esto, porque Chile será el anfitrión de una cumbre a nivel mundial, además de ser el centro de la discusión sobre el tema ambiental, no sólo durante la COP25, sino también en los meses venideros.

Fotografías: www.latercera.cl