Estudiantes UC aplican sus conocimientos en comunidades vecinas de los campus

Según se consigna en el sitio del Centro de Desarrollo Docente UC “Aprendizaje Servicio (A+S)” se define como una metodología de enseñanza-aprendizaje que busca el aprendizaje activo de estudiantes, aplicando sus conocimientos a contextos reales mediante servicios entregados a socios comunitarios con necesidades genuinas. Con esto, la UC se compromete a potenciar la formación de sus estudiantes en responsabilidad social contribuyendo al desarrollo del país.

Dentro de los socios comunitarios destacan las organizaciones no gubernamentales, instituciones de educación, unidades institucionales, y por supuesto, comunidades vecinas de nuestros campus, representadas a través de sus organizaciones sociales. 

“Uno de los objetivos de este trabajo bidireccional de la UC en los territorios es que no solo las comunidades reciben un servicio de parte de un curso específico, sino que permite al estudiante mantener un proceso de aprendizaje activo, aplicando sus conocimientos a contextos reales mediante servicios entregados a socios comunitarios con necesidades genuinas”, señala Sebastián Navarro, encargado territorial de vinculación y desarrollo comunitario de la Dirección de Sustentabilidad UC.

Los cursos que participaron de esta actividad son parte de diferentes carreras de nuestra universidad. Desde la Facultad de Teología los estudiantes del curso “Espíritu Santo: presencia y acción” trabajaron con la pastoral ecológica de la parroquia Santa Bernardita del barrio El Aguilucho, colindante al campus Oriente UC. Se dividieron en dos grupos, en donde el primero se enfocó en la elaboración de una fachada que fuese útil para las actividades de la agrupación, principalmente para darles mayor visibilidad y presencia en los eventos desarrollados en el barrio; mientras que el segundo grupo realizó, junto al grupo ecológico, un taller vinculado a concientizar sobre el cuidado del agua a los niños de 3° básico del colegio “Regina Pacis” ubicado en el sector.

Pedro Kastowsky, vecino del barrio “El Aguilucho”, asegura que su experiencia junto a los estudiantes de la UC en ambos proyectos fue muy enriquecedora y necesaria. “Es una muy buena forma de que los jóvenes se relacionen con los vecinos y conectar diferentes generaciones”, agrega. 

Además, estudiantes de la carrera de Nutrición y Dietética UC, desarrollaron un programa educativo ajustado a las necesidades de los socios comunitarios, junto a alumnos y apoderados de la Escuelita Libre Almeraki, la junta de vecinos Villa Bancaria y Santa Elena, cercanas al campus San Joaquín.

Por su parte, los niños y niñas del Jardín Infantil Nuevo Mundo, de entre 0 y 4 años, recibieron controles preventivos de parte de los estudiantes del curso Cuidados de la Enfermería en el Ciclo Vital de la Escuela de Enfermería UC. Herleyn Agurto, académica de la carrera, explica que los estudiantes de 2do. año pudieron poner en práctica el conocimiento adquirido y realizar controles preventivos de salud a los niños y niñas.

“Es una súper buena experiencia para los estudiantes que se debería seguir potenciando. Es un plus que esté al lado del campus San Joaquín, ya que todo lo llevamos nosotros como camilla, podómetro, etc. Segundo, nos conocían como escuela y tercero, tanto los docentes del jardín como de la escuela eran empáticos y cooperadores con nuestra atención”, agrega la profesional. 

Finalmente, estudiantes de la carrera de Terapia Ocupacional se vincularon con el grupo de adultas mayores pertenecientes al comité de seguridad Villa Campus, en donde, mediante el curso de Habilidades Terapéuticas, pudieron conocer las necesidades de las adultas mayores y abordar sus requerimientos en tres talleres lúdicos de trabajo.

Con esto, la UC potencia la formación de sus estudiantes en responsabilidad social que contribuye al desarrollo del país.